País

Cuando se habla de los recortes en la sanidad pública o en la educación, o se intenta analizar a fondo la crisis que vive la industria cultural y de ocio en España, se suele recurrir con frecuencia a la pregunta “¿Qué tipo de país queremos?”.  Analizando la prensa de la última semana, la respuesta no deja lugar a dudas. Por un lado, leo que España es el país de Europa con mayor índice de jóvenes que ni estudian ni trabajan. Por otro, los mandamases de las comunidades más importantes apuestan por convertir el suelo patrio en un inmenso parque temático. Blanco y en botella. Un país de camareros y limpiadoras. Y el que no se resigne, ya sabe dónde está la puerta.