San Faustín

En mi perfil hay una frase que, hasta ayer, me parecía perfecta para definir este blog: “Madurito sin interés”. Digo que hasta ayer porque una mente más lúcida me ha puesto en mi sitio: “Las insustancialidades de un viejo decrépito”. Insuperable. La certera definición apareció ayer en facebook, obra de una sociedad secreta conocida con el nombre de San Faustín (santo pequeño, de gran pitilín). A muchos no tengo que explicaros que se esconde detrás de tan enigmática organización. Al resto, mejor que continuéis en la ignorancia.