Se acerca una ola de calor y me surge el mismo interrogante de todos los años: Pantalón corto, ¿sí o no? Evidentemente, no. Hay que envejecer con dignidad. El pantalón corto en el hombre tiene fecha de caducidad: no más allá de los 12 años, según un estudio de la Universidad de Pensacola. El límite de edad es el mismo que para el pantalón de peto, año arriba, año abajo. Las autoridades deberían de tomar medidas disuasorias. Multar al que habla por el móvil en pantalón corto, por ejemplo, y si además va en patinete eléctrico, cárcel. Los mayores de 50, cadena perpetua revisable. Solo son unas modestas ideas para un mundo mejor y un Bilbao más habitable.
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