Real

Sin aire estoy desde que ayer, sin previo aviso, me topé con la serie sobre Felipe y Letizia que dan en Telecinco. Andaba yo de zapeo cuando unas imágenes me produjeron una largo y sentido escalofrío: un tipo treintañero, así en plan gansote, en pantalón corto, mirando absorto la televisión donde aparece una presentadora del telediario. Se le acerca una señora, con un chal por los hombros. El mozalbete suelta de sopetón: “Es guapa, ¿verdad?”. A lo que la mujer contesta con otra pregunta: “¿Quién es? ¿La conoces?”. “Una presentadora de televisión. Todavía no la conozco...”, sentencia el chavalote en plan picarón. Seguido se ve a la presentadora de televisión que va a una cena a la casa del periodista Pedro Erquicia. Este abre la puerta y la susodicha suelta, en uno de los momentos televisivos más difíciles que he vivido, “encantada, eres una referencia para toda la profesión”· Me desmayé. Cuando me desperté, en la tele ponían una porno. ¡Qué alivio!