Álvar

El sábado fui al Teatro Arriaga a ver "El principio de Arquímedes", un texto sobre los miedos contemporáneos, los prejuicios y la confianza, con un caso de presunta pederastia como motor de la historia. Thomas Vinterberg trató el mismo tema en su última película, la estupenda "La caza". En la obra que ha dirigido con pulso firme Carlos Panera tiene un papel protagonista Álvar Gordejuela, una excelente persona humana, mejor amigo y en el camino correcto para convertirse en un actor de largo recorrido. Después de los halagos llegan los sopapos. Muy suavecitos, ya que la interpretación de Álvar no desmerece a la del resto del reparto, aunque aún le sobra cierta rigidez y le falta soltura, algo que solo se consigue con trabajo y humildad. Álvar tiene la cabeza bien amueblada y pronto convertirá en realidad lo que ahora intuimos. Estoy convencido de que estamos ante los primeros pasos de un gran actor. Al tiempo.