Disfraces

Ya pasó. Me refiero a la fiesta de Halloween, medio disfrazado, con niños y a las 6 de la tarde. Al terminar, una adolescente con la que coincidí en la puerta me recordó la mierda de disfraz que llevaba. Le expliqué que era un medio disfraz y ella dijo algo de medio bobo, no, bobo entero. No sé qué querría insinuar. La gente se curra mucho lo de los disfraces. A mi lado tenía un tipo que parecía un doble de Cañita Brava. Era idéntico. Luego me enteré de que era el propio Cañita Brava. Así es más fácil, pensé. Tendré que empezar a pensar ya en el disfraz del año que viene. O en cambiar de vida.