El Atea

Creo que tengo que cambiar de estilo. Un día de la semana pasada fui de cena con mis sobrinos y sus parejas. Entre plato y plato oí que algunos de ellos hablaban de blogs y comparaban el Fugitivo con Cosmopolitana. Descubrí dos cosas: que prefieren a Cosmopolitana. ¿La segunda? Que son medio bobos. Y majos, también. ¿No podían hablar del tiempo o de la crisis?  No, ellos de sinceros por la vida. ¡Qué no dirán de su tío cuando no está presente! No, no os preocupéis, no les pague la cena. A pesar de la compañía pasé una velada agradable. Volví a uno de mis restaurantes favoritos, el Atea. Me imagino que la mayoría ya lo conocéis. Unos platos sabrosos, una inmejorable carta de vinos y unos precios ajustados en uno de los locales más singulares y cosmopolitas de Bilbao. A los postres tuvimos la suerte de charlar con el cocinero, y propietario, Daniel García, recién llegado de la casa madre, el Zortziko de Alameda Mazarredo. No exagero si digo que Daniel es uno de los mejores embajadores que tiene Bilbao. Un apunte para terminar, destacar el eficaz e impecable servicio de sala, con Mikel García como maestro de ceremonias. Un lujo.