Seguidores

martes, 11 de agosto de 2015

Locos


Mi hija acostumbra a llevar en la mano películas y muñecos de Disney. Y es muy tocona, muy de acercarse a la gente a la espera de una sonrisa cómplice. Quiere love, como todos. Os lo cuento porque últimamente esta actitud espontánea de mi hija provoca mayor rechazo del habitual. Y es que Bilbao está llena de turistas, por lo menos en su casco antiguo, y ya son varias las ocasiones que nos han confundido con vendedores ambulantes, gente muy peligrosa, por lo que intuyo. Entiendo que no es muy normal para un japonés encontrarse con una chavala de 19 años con cuatro películas y otos cuatro muñecos -todavía no sé como lo consigue- en las manos y aceptarlo como si no pasara nada. Pero me preocupa que lo que antes se recibía con extrañeza se empiece a percibir con temor. Locos sí, pero inofensivos. Y por cierto, si que te confundan con un vendedor ambulante es triste, no te digo tener la desgracia de serlo.

1 comentario:

  1. Estoy pensando en hacerme batracio anuro (sin rabo) aunque dudo que me dejen entrar en su especie.
    Cada vez me da más no se qué pertenecer al insustancial género humano.

    ResponderEliminar