Militancia

La situación de la industria del cine es tan sensible que si uno reivindica mejores películas parece que se alía con el enemigo. Por ejemplo, El Crítico Larrauri me dice en un comentario a mi entrada "Buenas películas" que le envíe el texto  a Montoro "que seguro que lo reparte en el Congreso". Qué quieres que te diga, pero últimamente voy al cine más por militancia que por verdadero interés. ¿Me lo tengo que callar? Pues no, porque este blog lo leen cuatro gatos y la mayoría de ellos -¿tres?- saben de mi falta de criterio. En casa, en el Iplus, tengo grabadas películas que no he visto de Louis Malle y Oliver Stone o la última temporada de "Breaking bad", la segunda de "The Newsroom" y nuevos capítulos de "The good wife", "Homeland" o "Americans". Y puedo darle a un botón y verlas en versión original subtitulada, mientras me tomo una cervecita bien fresca. Lo que quiero decir es que para moverme de casa me tienen que ofrecer algo mejor que lo que ya tengo. Y si me animo, hay que tener en cuenta que desde mi portal a los cines más cercanos hay cientos de bares que me confunden...