La cualidad que más admiro de la gente es la vitalidad. Me parece más importante para triunfar en esta vida que la inteligencia. Ayer, al terminar la jornada, mi jefe salía por la puerta hecho un chaval, mientras a mi me tuvieron que ayudar mis compañeros a levantarme del asiento. La vitalidad es la clave. Hay muchos ejemplos de personas límites pero con el empuje suficiente para dar el pego. Luego están los que tienen la inmensa suerte de compaginar inteligencia y vitalidad. Lo digo por gente como Alex de la Iglesia, quien hoy ha tuiteado que está a punto de publicar un libro titulado "Recuérdame que te odie". Así, como si nada, mientras rueda un documental sobre Leo Messi o presenta "Musarañas", una película en la que ejerce de productor. Y además, me han contado que saca tiempo para pasarlo bien con los amigos. En fin.
Alex se casa con la Bang.
ResponderEliminarEso si que es inteligencia y vitalidad.
No te creas todo lo que lees...
Eliminar¿Una película sobre Messi? Me da que Alex no ha pisado en su vida un campo de fútbol. Habrá que verla...
ResponderEliminarOtro que no para es Andrea Camilleri. Este año he leído dos novelas nuevas del comisario Montalbano. Y Camilleri estará ya cerca de los 90...
ResponderEliminarCamilleri cumple 89 años en septiembre.
EliminarTu jefe me recuerda un poco al general Patton. Los soldados norteamericanos lo llamaban "Sangre y energías", porque los días que estaba de buen humos palmaban 2000 hombres en una escaramuza suicida ordenada por él.
ResponderEliminarA mi jefe ni lo mentes. Es el puto amo y punto.
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