En opinión del cineasta John Waters, las mejores películas de 2106 han sido "Elle", de Paul Verhoeven, y "Julieta", de Pedro Almodóvar. Los críticos de Cahiers du Cinema también eligieron a la película de Almodóvar como una de las 10 mejores del pasado año. Leo hoy en la prensa que el director de "La piel que habito" presidirá el próximo Festival de Cannes. "Julieta" se estrenó ante la indiferencia de la crítica española, más preocupada por la aparición de Almodóvar en los Papeles de Panamá que en las bondades de su nuevo trabajo. El público tampoco fue tan generoso como en otras ocasiones y la película pasó por nuestras salas como si se tratara de la obra de un debutante. Algunos opiniones favorables, de personas de la cultura ajenas al cine y publicadas en las páginas de opinión de algunos medios, desentonaron ante la desidia generalizada. La animosidad hacia Pedro Almódovar por parte de la crítica española me retrotrae unos años en el tiempo, durante el estreno en el Festival de Venecia de "Balada triste de trompeta", de Alex de la Iglesia. Un público entusiasta aplaudió en numerosas ocasiones durante la proyección, produciéndose al final una ovación que duró varios minutos, con todo el público puesto en pie. La película fue reconocida con dos de los premios más importantes, creo recordar que dirección y guión, por un jurado presidido por Quentin Tarantino. Unos días después, la película se estrenó en las salas españolas y fue recibida con frialdad por la crítica. También se dijo que Quentin Tarantino premió a "Balada triste de trompeta" por su amistad con Alex, aunque la realidad es que solo se habían visto en una ocasión, unos minutos, durante una visita de Tarantino a Madrid. Por cierto, les presentó Pedro Almodóvar.
"No tiene importancia que maldigamos al vecino, siempre que no nos admiremos a nosostros mismos". Gilbert Keith Chesterton
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