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miércoles, 24 de abril de 2019
Cambiar de nacionalidad
Hay comportamientos que me resultan asombrosos. Uno de los mayores enigmas para mí es por qué las mujeres llevan fular aunque el termómetro esté a punto de explotar. Me pasa incluso con mi hija, que hay días que se quiere ir a dormir con uno puesto. Hoy, en la oficina, de las cuatro compañeras de trabajo, tres vestían fular. Pueden llevar minifalda, sandalias o ir en bragas, pero con un pañuelo al cuello. ¿Por qué?
El domingo fui al cine y durante la proyección ocurrió una anécdota que explica con contundencia los tiempos que vivimos. En la sala abundaba un público maduro, sobre todo mujeres. Detrás de mi se encontraban dos señoras, una muy mayor y otra de unos 60 años, con toda la pinta de ser madre e hija. En un momento de la proyección, creo que fue en uno de los trailers, aparecían dos mujeres en una escena y una de ellas se dirigió a la otra con un elocuente "hola mamá". Pues bien, ante semejante complejidad, la menos mayor de las féminas que tenía sentadas detrás le dijo a la otra "es su madre". ¿Será que pido demasiado?
Recién llegado del dentista puedo asegurar que anestesiado se vive mejor. Creo que tengo alma de yonki.
¿Alguien sabe que tramites hay que hacer para cambiar de nacionalidad? No digo tener doble nacionalidad. Quiero dejar la que tengo ahora y pillar otra, la que sea. No digo ser sueco o noruego, que va, cualquiera. Es urgente.
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