
He pasado unos meses difíciles, como si no los hubiera vivido. Es en estas circunstancias cuando me doy cuenta de que soy un afortunado. Tengo siempre alrededor estímulos que me ayudan a continuar, amistades inquebrantables, personas que siempre están en los malos momentos, a pesar de que las suelo olvidar en los buenos. Luego está el cine, mi último refugio, y los libros, unos compañeros de viaje que se merecen más protagonismo en mi vida. Estoy empezando a recobrar una ilusión que he tenido arrinconada, como si mi tiempo fuera el pasado y desdeñara el presente y el futuro. Empiezo a vivir, a hacer planes, a relacionarme. Ya era hora.
Un libro:"Payasos en la lavadora", de Alex de la Iglesia
Una película: "La taberna del irlandés", de John Ford
Una canción: "Centro di gravità permanente", de Franco Battiato
Nunca es tarde. Y ya lo dijo el mago de Oz: "no importa lo mucho que tú quieras, sino lo mucho que te quieran a tí".
ResponderEliminarBuen día.