La calle Great Jones

Alguien dijo que "lo frívolo no es lo contrario de lo serio, sino de lo aburrido". Y yo siempre he sentido una inclinación irresistible hacia la frivolidad. Este blog es un ejemplo evidente de lo que digo. Siempre he reivindicado a los cineastas o escritores que me alegran la vida y he rehuido a aquellos que en nombre del arte supremo lo único que consiguen es que me fatigue. La comedia es el género que más placer me ha dado y también el que más me ha enseñado sobre la vida y las personas. Sin Wilder, Hawks, Cukor, Berlanga, Tati y tantos otros todo hubiera sido más aburrido y yo, peor persona. Lo digo porque, por fin, he conseguido acabar una novela de uno de los grandes nombres de la literatura contemporánea, el norteamericano Don DeLillo. El libro se titula "La calle Great Jones" y, aunque la escribió en 1973, no se publicó aquí hasta finales del año pasado. Y me ha gustado, y he disfrutado, sobre todo cuando no pretende ser el escritor, y las palabras fluyen sin concesiones a la galería. Se nota que cuando escribió "La calle Great Jones" todavía no sentía la necesidad -ni la presión- de buscar la excelencia.