Seguidores

viernes, 29 de enero de 2016

El club


Me imagino a los grandes nombres de la transición, y a sus más fieles seguidores, desconcertados preguntándose por qué una parte de los nuevos, y algunos de los viejos, no quieren formar parte del club. ¡Con lo bien que se vive al calorcito! Incluso, si no das mucho la murga, te dejan trapichear. Dentro del club, lo que quieras. Por ejemplo, Pedro Sánchez, con lo tranquilo que viviría en un consejo de administración de una multinacional. ¿Cuántas veces se lo habrán propuesto desde las últimas elecciones? Y él empecinado en buscar nuevos compañeros de viaje. Juventud alocada, pensarán. Y luego están los catalanes, que se han vuelto majaras los muy desagradecidos. ¡Con el amor que han recibido en los últimos años! En palmitas, los han tenido. Igual se han pasado con el cariño. Lo de los nuevos, corriente desaliñada, es más comprensible porque todavía desconocen las bondades de pertenecer al club. Y además es sabido que reciben toneladas de dinero de gente muy mala y estrafalaria en el vestir. Que no sé qué es peor...

"¿No es usted la señorita Smith, hija del banquero multimillonario Smith? ¿No? Perdone, por un momento pensé que me había enamorado de usted". Groucho Marx

1 comentario:

  1. Ya tengo ganas de salir a cazar hippies melenudos con coleta con pretensiones de acabar con el club. Casta Azkatu.

    ResponderEliminar