Mañana viernes se estrena "Pieles", el primer largometraje de Eduardo Casanova, diversas historias que se entrecruzan, protagonizadas por personajes extremos, deudores del cine de Tod Browning, y del Lynch y Cronenberg más esquinados. El resultado, la película más insólita que puedas imaginarte. Con "Freaks" como gran referente, "Pieles" se sumerge con pasmosa normalidad en un mundo poblado por criaturas deformes, marginales, con todo tipo de taras, unos personajes a los que el director mira con cariño y comprensión. Esa es la gran baza de la película y la que convierte a Eduardo Casanova en un autor a seguir y a reivindicar. Aviso: ver "Pieles" es un reto para el espectador. En mi caso, lo que veía en la pantalla me resultó, a ratos, doloroso, y necesité de varios descansos hasta conseguir terminarla. No pretendo quitar las ganas a nadie de verla, ni lo contrario, solo quiero que sepas a lo que te enfrentas.
"Si puede ser escrito o pensado, puede ser filmado". Stanley Kubrick
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