Un comediante

"Me siento orgulloso de vivir en un país que invierte en tecnología", me ha dicho hoy un tipo con apariencia de normalidad. No llevo ni dos horas levantado y ya llevo en la mochila semejante carga. La gente está muy mal. No sé si sobran la mitad, como dice mi amigo Juanma Pagazaurtundua, más conocido como Gudari, o es que yo conozco a lo mejor de cada casa. La semana pasada escribí sobre una familia de México que ha venido a Bilbao a pasar un año entre nosotros. Esa entrada fue leída en la patria de Cantinflas por varios de los amigos de la citada familia. Uno de ellos preguntó si El Fugitivo del amor era un comediante. Parece ser que le habían hecho gracia mis tonterías y había relacionado mi persona con el individuo que aparecía en la foto que acompañaba al texto, un tipo con sombrero mexicano y bigote postizo. No era yo, sino mi amigo Gudari, un vasco nacido en México que se había emocionado con la visita de sus compatriotas. Él sí es un comediante. Conocido en la industria del cine por su excelente trabajo como director de producción, ha participado también como figurante sin texto en varias películas, en las que destacaba por su arrolladora presencia, que le había llevado a ser conocido como el Tom Selleck vasco. Pues bien, después de tan prolongado silencio, los espectadores conocerán por fín que voz se esconde detrás de ese físico privilegiado y es que Juanma es uno de los protagonistas de "Operación Concha", una de las películas que se proyectarán en el Festival de Cine de San Sebastián que comienza el próximo viernes. Interpreta a un sicario de broma de nombre Rivas y lo que más me ha impresionado de su personaje, ya he visto la película, es que dice las mismas frases que Gudari cualquier día de poteo por la Plaza Nueva, incluida "sobran la mitad". Es lo que tiene invertir en tecnología, que se descuida lo demás.

"Un actor es una persona que no te escucha a menos que estés hablando de él". Marlon Brando

Foto de Javier Ruiz San Miguel