Jigger cocktail bar

Hace unos años escribí una guía sobre Bilbao -"Bilbao Bizkaia open mind"- que editó la Diputación Foral de Bizkaia. Se presentó en Copenhagen, y posteriormente en varias ferias de turismo de Europa, y se repartió por los hoteles y restaurantes de Bizkaia. Os lo cuento porque a la hora de elaborar la guía no pude incluir lo primero en lo que me fijo de las guías de las ciudades que visito: coctelerías y clubs de jazz. Es verdad que Bilbao acoge habitualmente actuaciones de jazz -encomiable el trabajo que realiza la Bilbaína Jazz Club-, pero habitualmente están patrocinadas por el Ayuntamiento o la Diputación y no hay bares que programen regularmente conciertos. También es innegable que siempre han existido locales que preparen combinados en condiciones, los tradicionales gintonics o destornilladores. Sin pensar mucho, me vienen a la cabeza el Jaime, Estoril, Kendall o La gallina ciega. Pero no es menos evidente que desde el cierre del JK, Bilbao tenía la carencia de una coctelería en condiciones. Pues bien, problema resuelto, ya es posible tomarse un cóctel con fundamento sin tener que viajar. En la calle Máximo Aguirre se ha abierto la coctelería Jigger, un local sobrio pero lleno de detalles, con una extensa carta, repleta de bebidas sugerentes y donde te informan hasta de quién es el sastre que ha creado el vestuario del personal o dónde adquieren los licores y la vajilla. Camareros jóvenes y muy profesionales -el propietario fue elegido recientemente como el mejor barman del mundo-, en un local con un único pero: los precios. Los cócteles cuestan 11 euros y el gin-tonic de la casa, 14 euros. ¿Quién dijo que la calidad no es cara?