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Mañana, por fin, entrego las llaves de casa a su nuevo propietario. No pienso derramar ni una lágrima, como no sean de felicidad. ¡Qué complejo es librarse de un piso y cuánto esfuerzo requiere! Los últimos coletazos están siendo los más difíciles. Hoy, a Iberdrola. Mañana, al Consorcio de Aguas. Lo que peor llevo es el tema Digital +. Tengo problemas para su instalación en la nueva casa y me están volviendo loco. Y no puedo vivir en un mundo en el que enciendes la televisión y aparecen Txetxu Ugalde, Joseba Solozabal, Ana Rosa o Jorge Javier. A lo bueno nos acostumbramos fácilmente. Pero no al revés. Y me doy cuenta de la razón que tenía Groucho Marx cuando dijo aquello de “encuentro la televisión muy educativa. Cada vez que alguien la enciende, me retiro a otra habitación y leo un libro”. ¡Instalación, ya!